Se prepara una línea telefónica de ayuda al suicida más corta, el número 988

Tribune Content Agency

Un número de tres dígitos fácil de recordar, similar al 911, para aquellos que consideren suicidarse podría salvar vidas, afirman expertos, pero también representa un cambio simbólico en un mundo todavía estigmatizado: que las emergencias de salud mental son tan importantes como las físicas.

Pero la facilidad del nuevo número y la optimización del acceso también deberían venir acompañados con una financiación adicional para los servicios de salud mental, según los activistas de la salud mental. Ambos conceptos están representados en la legislación federal pendiente que eventualmente establecería el 988 como el número de la Línea Nacional de Prevención del Suicidio, que actualmente es más largo: 800-273-TALK (800-273-8255).

“Este es un paso para facilitar la obtención de ayuda si la necesitas”, indicó Colleen Creighton, directora ejecutiva de la American Association of Suicidology. “Es un paso en la dirección correcta, pero no la solución completa”.

La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por su sigla en inglés) comenzó a analizar la creación de un nuevo número de emergencia de tres dígitos para las crisis de salud mental después de la aprobación de la Ley Nacional de Mejora de la Línea Directa sobre el Suicidio de 2018. Y en un informe publicado el verano pasado, la FCC sugirió el cambio, afirmando que mejoraría el acceso a los recursos para salvar vidas. El mes pasado, la FCC comenzó formalmente el proceso de establecer el 988, refiriéndose también a la necesidad de eliminar el estigma que rodea a las enfermedades mentales.

Pero ese proceso podría tomar 18 meses o más, dado el trabajo de infraestructura de comunicación necesario, así como la necesidad de una campaña de información pública.

La legislación federal bipartidista (si se aprueba) también establecería el 988, pero permitiría a los estados cobrar tarifas, similares a los cargos existentes del 911 en las facturas telefónicas, para financiar los recursos locales salvavidas y para la salud mental.

El número 988 sería “catalizador del cambio”, expresó John Draper, director ejecutivo de la línea salvavidas nacional, refiriéndose a la importancia de tratar las crisis de salud mental con la misma urgencia que las crisis médicas del 911. El suicidio es la décima causa de muerte en los EU, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.

Establecer el 988 como otro número de emergencia envía el mensaje de que las crisis de salud mental están a la par de los problemas médicos físicos, dijo.

También mejorará la atención para quienes no pueden pensar en el número 800 salvavidas actual nacional en medio de una crisis y en su lugar marcan el 911, señaló Draper.

“Un agente de policía y una ambulancia se presentan a su puerta. Si así es como nuestra sociedad trata las emergencias de salud mental, es menos probable que la gente llame”, comentó. El número 988 propuesto “no solo les daría la atención correcta, sino que no les dará la atención equivocada”.

El informe de la FCC estimó que las llamadas a la línea salvavidas (que superaron los dos millones en 2018 y se esperaba que sumaran unos 2.5 millones el año pasado, según Draper) podrían duplicarse una vez que el 988, fácil de memorizar, esté activo.

Eso significa un mayor volumen de centros de llamadas locales, así como una presión sobre el sistema de atención a la salud mental, que ya cuenta con pocos recursos en todo el país, señaló Creighton.

La línea salvavidas nacional, con sede en Washington, D.C., dirige las llamadas según el código postal de la persona que llama a unos 160 centros de crisis locales que cuentan con consejeros capacitados. Esos centros, en su mayoría, no se administran con dólares federales, sino con subvenciones estatales, locales y privadas, explicó. Los ingresos adicionales del estado a través de las tarifas propuestas en las facturas telefónicas podrían financiar centros adicionales, personal, capacitación y otros recursos.

“Nuestra preocupación general … a medida que esto avanza, es que necesitamos asegurarnos de que los sistemas (de apoyo a la salud mental) … obtengan más financiación”, indicó Creighton. “Este no es un modelo sostenible al nivel de financiación que tiene ahora”.

“Eso es lo crucial de la cuestión”, dijo Karen Ayala, directora ejecutiva del Departamento de Salud del Condado de DuPage, que dirige uno de los centros de llamadas de la región de Chicago que acepta llamadas de auxilio. “Si vamos a ampliar el acceso, ¿tenemos la capacidad de cumplir?”

Ayala añadió que no solo se trata de tener suficiente personal para responder a las llamadas y los recursos para el tratamiento inmediato, sino también la atención a largo plazo para aquellos que lo necesiten.

En el centro de llamadas del Condado de DuPage, que funciona las 24 horas del día los siete días de la semana y cuenta con un personal de hasta seis consejeros o trabajadores sociales de nivel de maestría, se evalúa inmediatamente el riesgo de las personas que llaman, señaló Lori Carnahan, directora de salud conductual del Departamento de Salud del Condado de DuPage.

Esa evaluación determina si la persona que llama necesita una respuesta de emergencia, hospitalización, o una referencia a otros servicios, explicó. A veces también es necesario un seguimiento.

En el Condado de DuPage, una subvención federal proporciona esfuerzos de seguimiento extensos que incluyen una unidad de crisis móvil y una unidad de hospitalización de 12 camas, expuso Carnahan. Pero la mayoría de los fondos para los servicios proporcionados por el centro de llamadas de DuPage proviene de dólares estatales.

Si el volumen de llamadas aumenta, dijo Ayala, esperaría que hubiera formas de que el estado aumentara los flujos de financiación, “especialmente durante estos tiempos de escasez en Illinois”.

Community Counseling Centers of Chicago es el único centro de llamadas salvavidas en la ciudad, informó el presidente Chris Carroll. El centro, que provee muchos otros servicios, solo responde a llamadas de auxilio durante las horas de oficina regulares, de lunes a viernes.

La creación de un número 988 probablemente significaría que aumentarían sus horarios, dijo Carroll, dado que habría fondos disponibles. Aunque el centro ofrece otras intervenciones de crisis las 24 horas del día los siete días de la semana, no responde a las llamadas de auxilio diariamente como lo hacen otros centros de Illinois porque no hay tanta necesidad en Chicago, dadas las otras líneas de ayuda para suicidas disponibles a través de hospitales u otras organizaciones sin fines de lucro, destacó.

Pero es probable que el 988 se convierta en el número al cual acudir para los que están en crisis y que probablemente genere más llamadas, dijo Carroll.

“Tan solo imagina el nivel de angustia como para que estés dispuesto a quitarte la vida”, señaló. “¿Puedes imaginarte tener que marcar más números (que el 911) para comunicarte con la policía? La gente se frustra por eso”.

“En todo el país, todo el mundo, de niño, es entrenado para llamar al 911”, añadió. “Eso ha estado en nuestros cerebros para cualquier cosa y todo lo que pudiera ser un problema. Pero creo que tener (el 988) para el suicidio es realmente genial. Se trata de las personas que están al otro lado del teléfono. ¿Cuál es la manera más rápida de conseguir ayuda?”

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