Sí, los jóvenes están enfermando gravemente de COVID-19

Tribune Content Agency

Nuevas evidencias procedentes de Europa y Estados Unidos sugieren que los adultos jóvenes no son tan inmunes al nuevo coronavirus que circula por todo el mundo como se pensaba originalmente.

Pese a que los datos iniciales de China mostraban que los ancianos y las personas con otros problemas de salud eran los más vulnerables, los jóvenes (desde los veinteañeros hasta aquellos de cuarenta y tantos años) están cayendo gravemente enfermos. Muchos requieren cuidados intensivos, según informes originados en Italia y Francia. El riesgo es particularmente grave para aquellos con padecimientos que aún no han sido diagnosticados.

“Puede ser que en la generación millennial, nuestra generación más grande y la que nos sostendrá en las próximas décadas, haya un número desproporcionado de infecciones entre ese grupo”, informó Deborah Birx, la coordinadora de respuesta al coronavirus de la Casa Blanca, en una conferencia de prensa el miércoles, citando los informes.

Los datos confirman esa preocupación. En Italia, el país más afectado de Europa, casi una cuarta parte de los casi 28 mil pacientes de coronavirus tienen entre 19 y 50 años, según el sitio web de datos Statista.

Tendencias similares se han visto en Estados Unidos. Entre los casi dos mil 500 primeros casos de coronavirus en el país, 705 tenían entre 20 y 44 años, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés). Entre el 15 y el 20 por ciento terminaron en el hospital, incluyendo un cuatro por ciento que necesitó cuidados intensivos. Pocos murieron.

Uno de esos adultos jóvenes es Clement Chow, un profesor asistente de genética en la Universidad de Utah. “Soy joven y se supone que no tengo un alto riesgo, sin embargo estoy en la UCI con un caso muy grave”, escribió Chow en un tuit el 15 de marzo. “Realmente no sabemos mucho sobre este virus”.

Según sus mensajes de Twitter, Chow tuvo fiebre baja durante unos días y luego una tos fuerte que le provocó un fallo respiratorio. Resultó ser coronavirus. Terminó con un alto flujo de oxígeno en la UCI. Cuando llegó el jueves pasado, fue el primer paciente allí. “Ahora hay muchos más”, tuiteó.

Chow no dio su edad en los tuits, pero el sitio web de su laboratorio indica que se graduó de la universidad en 2003 y tiene dos hijos. No respondió a un correo electrónico y Bloomberg no pudo confirmar independientemente su estado como paciente.

Es cierto que el riesgo de muerte aumenta precipitadamente con la edad. Mientras que solo había 144 pacientes mayores de 85 años, hasta el 70 por ciento fueron hospitalizados y el 29 por ciento necesitó cuidados intensivos, según el informe de los CDC. Uno de cada cuatro murió, anunció la agencia en el Informe Semanal de Morbilidad y Mortalidad.

En la conferencia de prensa de la Casa Blanca del miércoles, el presidente Donald Trump imploró a los jóvenes que dejaran de comportarse de manera imprudente, como ir de fiesta, a la playa y a bares. Sin embargo, como los campus universitarios en todo el país cierran y requieren que los estudiantes se vayan, incluso los jóvenes más concienzudos se enfrentan a una difícil elección. Con sus años académicos abreviados y sus planes de graduación destrozados, muchos conducen o vuelan a casa, donde corren el riesgo de exponer a sus padres y abuelos al COVID-19.

Las mismas preocupaciones aplican a los jóvenes que empiezan en las grandes ciudades y que de repente se ven presionados a volver a sus ciudades de origen. El padre de Livia Calari le ha estado rogando que vuelva a casa durante semanas. La joven de 25 años y su novio viven en Brooklyn, Nueva York, y han observado con nerviosismo cómo se intensifican las advertencias de los funcionarios y se cierra la ciudad en la que viven. Pero se quedan aquí, al menos por ahora.

La pareja tiene dos gatos que tendrían que trasladar. Si se hospedan con el padre de Calari en Washington, D.C., se les pediría que hicieran una autocuarentena en un piso separado durante dos semanas. Además, la idea de llevar el virus accidentalmente les preocupa.

“Tengo mucha ansiedad, tal vez irracionalmente, de contagiarlo”, dijo Calari sobre su padre, que tiene 65 años. “Me sentiría muy mal”.

Después de días de pensar en sus opciones, decidieron quedarse en Nueva York y reevaluar si un encierro llega al punto de no poder salir de su apartamento para dar paseos.

Los funcionarios encargados de la lucha contra las infecciones están dispuestos a hacer todo lo posible para hacer correr la voz entre los jóvenes donde se congregan, incluyendo el podcast Pardon My Take de Barstool Sports, uno de los programas deportivos más populares entre los jóvenes.

Anthony Fauci, el jefe del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas, le dijo a los anfitriones lo estresante que ha sido el brote.

“No te puedes imaginar”, expresó. “Ves lo que pasó en China y ves lo que está pasando en Italia. Tenemos el virus en Estados Unidos y queremos asegurarnos por medio de nuestros esfuerzos de que no tenemos ese grado de enfermedad y sufrimiento que estamos viendo en otros países”.

Y convocó a los jóvenes a hacer el esfuerzo de protegerse a sí mismos y a la población en general.

“Nadie es invulnerable, pero incluso si lo haces todo muy bien, tienes que ser una parte muy importante de nuestro esfuerzo nacional para contener el brote”, sugirió Fauci. “No eres una persona pasiva en esto. Eres una parte importante del plan activo para contener esta epidemia. Realmente te necesitamos. Esto no es algo que pueda tener éxito sin ti”.

Visit Bloomberg News at www.bloomberg.com