El alto precio de ser enemigo de Trump

Tribune Content Agency

El presidente Donald Trump deja claro su desdén por California, arremetiendo contra el Estado Dorado como un lugar remoto “sucio” y “horrible”, maldecido por los desamparados y los incendios forestales. California, a su vez, ha desafiado a la administración de Trump docenas de veces en temas como las emisiones de los automóviles, la inmigración y las cuotas sindicales.

Pero no es barato ser uno de los enemigos favoritos de Trump. Y en ningún lugar es más evidente que en el cuidado de la salud.

El Fiscal General del Estado, Xavier Becerra, gastó millones de dólares impugnando a la administración de Trump más de una docena de veces en temas de salud. Por ejemplo, ha tomado la iniciativa en la defensa legal de la Ley Federal de Cuidado de Salud Asequible, y en la lucha contra la regla de “carga pública” de la administración, que dificulta que los inmigrantes obtengan el estatus de residencia permanente si usan ciertos beneficios públicos, como el Medicaid.

Y los legisladores estatales están adoptando legislación para contrarrestar las acciones federales de atención médica, acumulando los costos de aprobación y aplicación de nuevas normas, como la prohibición de la venta de planes de salud a corto plazo y la prevención de que el estado imponga requisitos de trabajo a sus beneficiarios del Medicaid.

La cuenta total del estado por su disputa con la Oficina Oval es de al menos cientos de millones de dólares, con miles de millones más en juego. Aquí hay tres formas principales en que California está perdiendo dinero para la atención médica:

FINANCIACIÓN DEL TÍTULO X

En febrero de 2019, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos cambió las reglas del Título X, un programa que financia los servicios de planificación familiar. Bajo las reglas anteriores, los fondos federales no podían pagar abortos. Ahora, estos fondos ni siquiera pueden destinarse a los proveedores que refieren pacientes a otros lugares para abortos.

Clínicas como las filiales de Planned Parenthood, que se niegan a cumplir con las nuevas regulaciones, han renunciado a su dinero del Título X.

En California, eso significa que los fondos han sido recortados en millones de dólares. Essential Access Health, que dirige el programa del Título X en California, comentó que no podía poner una cifra en dólares sobre la cantidad exacta de fondos que se han perdido. Pero, según el grupo, más de 366 centros de salud en 38 condados de California recibieron fondos del Título X en 2018. Hoy en día, eso se ha reducido a 251 centros en 19 condados.

Aunque las disputas sobre la cobertura de los anticonceptivos pueden ser ideológicas, también se reducen a dólares y centavos, según Priscilla Smith, experta en derecho reproductivo de la Facultad de Derecho de Yale.

“Para California, esto significa que cada vez más personas que no tienen acceso a la cobertura de sus anticonceptivos utilizarán los recursos del estado tanto para la cobertura de los anticonceptivos como para los problemas de salud que resultan de su falta de acceso”, detalló Smith.

Essential Access Health, junto con el estado de California, Planned Parenthood y otros demandantes, llevaron a la administración de Trump a los tribunales por las regulaciones. Un juez federal de apelaciones se puso del lado de la administración a finales de febrero.

IMPUESTO SOBRE MEDICAID

Otra gran pérdida para el estado podría venir de una política de impuestos poco acertada.

El impuesto de la Organización de Atención Administrada (MCO) es un recargo sobre los planes de atención administrada que brindan cobertura a unos 10 millones de afiliados a Medi-Cal, el programa de seguro de salud pública de California para personas de bajos ingresos.

El impuesto ha existido durante varios años pero expiró en julio. La administración del gobernador Gavin Newsom pidió la aprobación federal para extenderlo por tres años, una solicitud que parecía muy segura.

“Con base a la reciente aprobación federal de un impuesto similar en Michigan, la aprobación federal de un paquete fiscal MCO de California reautorizado parece probable”, según un informe de febrero de 2019 de la Oficina del Analista Legislativo del estado.

No hubo tal suerte. En febrero, los funcionarios federales rechazaron la solicitud de California. Aunque no afecta al estado este año, le costará a Medi-Cal hasta dos mil millones de dólares en ingresos perdidos del año fiscal 2021-2022.

“Michigan tiene algo muy similar, ¿cómo es que nosotros no?”, preguntó Edwin Park, un profesor de investigación de la Universidad de Georgetown que tiene su sede en California.

California tendría que eliminar sus reservas en los próximos dos años fiscales para mantener el programa de Medi-Cal en su totalidad, explicó Scott Graves, director de investigación del Centro de Presupuesto y Política de California.

“Se crea un gran bache en el camino en la proyección”, expresó.

El estado planea volver a presentar su solicitud a finales de este año, pero el gobierno federal no se apresura a hacerle ningún favor a California.

“Como California es California, la preocupación es que la administración de Trump no lo apruebe”, predijo Park.

IMPULSAR LA LEY DE ATENCIÓN ASEQUIBLE

Uno de los proyectos favoritos de la administración de Trump ha sido derogar, reemplazar o desmantelar la Ley de Cuidado Asequible.

Tomemos el simple tema de la publicidad de los planes de seguro médico de Obamacare. En 2017, la administración de Trump anunció que recortaría el presupuesto federal para publicidad durante la temporada de inscripción en un 90 por ciento.

California respondió aumentando su presupuesto de publicidad. Para la temporada de inscripción de 2020, el estado presupuestó 121 millones de dólares en marketing y difusión. El gobierno federal presupuestó 10 millones de dólares.

Y cuando la administración de Trump eliminó la penalidad fiscal de la Ley de Cuidado de Salud Asequible por no tener seguro médico, California creó una, y ofreció subsidios financiados por el estado para ayudar a algunas personas a pagar el seguro. Este año, el estado está gastando cerca de 430 millones de dólares para subsidiar los costos de las primas de unas 625 mil personas.

“Obviamente sería estupendo que la administración hiciera su parte, como lo hizo la anterior administración”, apuntó Anthony Wright, director ejecutivo de Health Access California, un grupo de defensa del consumidor.

California puede absorber los costos de reforzar la Ley de Cuidado de Salud Asequible, dijo Wright. Lo que no puede hacer, agregó, es compensar la diferencia si la administración de Trump adopta otros puntos de su lista de deseos sobre la atención de la salud, como hacer grandes recortes al programa del Medicaid.

En su presupuesto federal preliminar para 2020-2021, Trump propuso recortar 920 mil millones de dólares del programa durante la próxima década, aunque es poco probable que eso llegue a la Cámara de Representantes controlada por los demócratas.

“Lo que me mantiene despierto por la noche son los amplios cambios del Medicaid que ascienden a los miles de millones de dólares”, concluyó Wright. “Eso es algo que está en un nivel totalmente diferente”.

Visit Kaiser Health News at www.khn.org